Hoy en día muchas personas se dedican plenamente a preparar las oposiciones ya que es trabajo asegurado para toda la vida.
Para ser funcionario simplemente basta con un examen, es decir, tienes que aprobar el examen y con tener la ESO o el bachillerato es más que suficiente, da lo mismo si eres una persona agradable o desagradable, da lo mismo que tengas estudios relacionados con la oposición o que no, aquí lo único que importa es el examen.
Una vez apruebas el examen relacionado con el puesto puedes hacer el examen de los perfiles lingüísticos (a no ser que ya tengas una titulación), sin embargo este punto parece ser que es de menor prioridad ya que gran parte del funcionariado que hay en Euskadi no tiene ni la menor idea de hablar y entender en euskera (en la próxima publicación me centrare en este punto).
La oposición finaliza con la lista de admitidos.
Las personas que llevan tiempo trabajando en administraciones publicas siempre tienen más ventaja, ya sea que han trabajado anteriormente en administraciones publicas pasando las pruebas de la oposición o sea porque han entrado por enchufe (que todavía lo hay).
En mi opinión, creo que todos los trabajos se deberían de privatizar porque el rendimiento del trabajador no es el mismo, una persona que sabe que tiene el puesto asegurado no va a rendir igual que una persona que no tiene el puesto asegurado y no le va a poner el mismo empeño a la hora de realizar sus tareas.